5 razones por las que repites el mismo tipo de pareja y cómo evitarlo

repito mismo tipo de pareja

CONTACTAR POR WHATSAPP

 

¿Otra vez lo mismo? 

 

Empiezas con ilusión, con la sensación de que esta vez sí, de que ahora todo será diferente.

 

Pero con el tiempo, te das cuenta de que estás atrapada en el mismo patrón de siempre.

 

La historia cambia, pero el guión es el mismo.
Diferentes nombres, pero los mismos problemas.
El mismo dolor, el mismo desgaste, la misma sensación de vacío.

 

Y quizá te has preguntado más de una vez:

¿Por qué siempre acabo con el mismo tipo de persona?
¿Por qué, por más que intento hacer las cosas diferente, la historia se repite? 

 

Si te reconoces en esto, no es casualidad. Hay cinco razones por las que caes en este bucle y, hasta que no las veas con claridad, será difícil romperlo.

 

Vamos a descubrir cuáles son y, lo más importante, qué puedes hacer para que esta vez sí sea diferente:

 

1. Crees que esto es "lo normal" en el amor 

 

Tal vez creciste viendo relaciones donde el amor era sufrimiento, donde había altibajos constantes, silencios, gritos o indiferencia.

 

Si esto fue lo que viste desde pequeña, es posible que, sin darte cuenta, ahora busques lo mismo porque es lo que conoces. Si nunca has vivido una relación sana, es lógico que te resulte difícil identificar qué es lo que realmente necesitas en una.

 

Pero la familiaridad no significa que sea lo correcto.

 

 

Ejemplos:


Tu madre justificaba cualquier mal comportamiento de tu padre porque "él es así", "es normal que a veces esté de mal humor" o "trabaja mucho". Ahora, cuando tu pareja te ignora o te trata mal, piensas que es parte de una relación y que no hay que darle tanta importancia.


Si creciste viendo que el amor era sacrificio, por ejemplo, si tu madre no tenía voz en casa, es probable que ahora pienses que para que te quieran, tienes que aguantar ciertas cosas.

  

Cómo romperlo: Empieza por cuestionarte qué entiendes por amor. Pregúntate:


"Si esto fuera una película, ¿querría ver este tipo de relación para el personaje principal?"

"¿Este amor me hace sentir en paz o en constante ansiedad?"

 

Si el amor se siente como una lucha, no es amor. Es costumbre disfrazada de necesidad. 

 

 

2. Buscas inconscientemente a alguien que valide tu valor 

 

Si en el fondo sientes que no eres suficiente, es posible que busques relaciones donde necesitas "ganarte" el amor del otro.

 

Te esfuerzas demasiado.
Das más de lo que recibes.
Justificas comportamientos que no deberías aceptar.

 

Y cuando por fin consigues un poco de cariño o validación, sientes alivio... hasta que vuelve la incertidumbre y el bucle comienza otra vez.

 

Ejemplos: 


Tu pareja te cancela los planes a última hora constantemente, pero en vez de enfadarte, piensas (o intentas pensar) "bueno, seguro que tiene una razón, no quiero ser demasiado exigente".

Cada vez que sientes que tu pareja se está alejando, te esfuerzas aún más: eres más atenta, más cariñosa, más comprensiva… como si tu amor pudiera hacer que se quede.

 

Aquí está la trampa: Si crees que el amor se gana, siempre estarás en relaciones donde sientes que tienes que demostrar tu valor.

 

Cómo romperlo: En lugar de obsesionarte con demostrarle a alguien que eres valiosa y que merece la pena que esté contigo, prueba esto:

 

Cada vez que te sientas tentada a justificar su falta de interés o compromiso, pregúntate: "Si yo me valorara realmente, ¿seguiría aceptando esto?"

En vez de preguntarte qué más puedes hacer para que te quiera, cuestiónate: "¿Me hace sentir bien esta persona tal y como es, sin que yo tenga que forzar nada?"

  

Pregúntate: "Si yo creyera que soy suficiente tal como soy, ¿qué tipo de pareja elegiría?".

 

 

 

3. Confundes intensidad con amor 

 

Si has tenido relaciones con altibajos extremos, donde pasas de sentirte en la cima del mundo a llorar en la almohada, es posible que hayas confundido intensidad con amor real.

 

Ejemplo: 


Te emocionas cuando tu pareja te dice que "no puede vivir sin ti", pero luego se muestra distante o hace planes sin contar contigo.

Cuando discutís, sientes una angustia enorme, pero cuando os reconciliáis, te sientes eufórica, como si fuera una película romántica.

 

 

Las relaciones inestables generan dependencia emocional.

La incertidumbre de no saber en qué punto estás crea una sensación de adicción.
 

 

Es como un sube y baja constante:

Un día te trata increíble, y sientes que todo merece la pena.
Otro día te ignora, y te vuelves loca intentando entender qué hiciste mal.

 

Cómo romperlo:
Si una relación te hace sentir más ansiedad que calma, no es amor. Es una montaña rusa emocional disfrazada de pasión.

 

Prueba esto:
La próxima vez que te sientas atraída por alguien, en lugar de preguntarte "¿Me hace sentir mariposas?", pregúntate: "¿Me hace sentir segura y en paz?"

 

Cada vez que sientas un subidón en una relación, pregúntate: "¿Esto es felicidad o alivio porque ya no me ignora?" 

 

Porque el amor de verdad no debería sentirse como una prueba constante porque eso es agotador y te drena tu energía, machaca tu autoestima y te genera aún más dependencia de él.

 

 

4. Crees que puedes cambiar a la otra persona 

 

Esta es una de las razones más comunes por las que muchas mujeres repiten el mismo tipo de relación.

 

Te dices a ti misma:

"No es su culpa, tuvo una infancia difícil".
"Solo necesita a alguien que le entienda".
"Con amor y paciencia, cambiará".

 

Pero... el amor no debería ser un proyecto de rehabilitación. 

 

Nadie cambia porque tú lo ames más fuerte.
Nadie se transforma solo porque tú le des mil y una oportunidades.

(Y no, él no es una excepción. Deja de buscar peros, que nos conocemos... 😉)

 

 

Cómo romperlo: Trabaja en aceptar que si una persona no está lista para una relación sana, nada de lo que hagas cambiará eso. Absolutamente NADA.

 

Prueba esto:
Cada vez que sientas la necesidad de "salvar" a alguien en una relación, pregúntate:

"¿Si nunca cambiara, seguiría queriendo estar con esta persona?"

Si la respuesta es no, ya tienes la respuesta que necesitas.

 

 

5. Sigues buscando lo que no tuviste 

 

A veces, repetimos relaciones que nos hacen daño porque, inconscientemente, buscamos reparar una herida del pasado.

 

Si de niña te sentiste poco vista, buscas a alguien que finalmente te haga sentir importante.

Si creciste con la sensación de no ser suficiente, eliges parejas que te hagan luchar por su atención.

 

 

El problema es que el amor no sana heridas del pasado. Solo las vuelve a abrir. 

 

Cómo romperlo: Lo que no recibiste de pequeña, no lo vas a encontrar en otra persona. Te lo tienes que dar a ti misma.

 

Prueba esto: 


Si notas que estás buscando en tu pareja algo que nunca tuviste (validación, estabilidad, cariño, atención), empieza a dártelo tú. Por ejemplo, si necesitas atención, date atención. Si necesitas validación, trabaja en reforzar tu autoestima sin depender de los demás.

Pregúntate: "¿Cómo puedo darme yo eso que tanto busco en los demás?" 

 

 

Ejercicio: Rompe el bucle y elige diferente 

 

Paso 1: Haz una lista de tus últimas relaciones y anota:

Cómo empezó la relación.
Cómo te sentías al principio y cómo terminó.
Qué comportamientos se repiten en cada una.

 

Paso 2: Escribe qué creencia te llevó a aceptar esos comportamientos.

Por ejemplo:

"Si soy lo suficientemente buena, me amarán" (te lleva a dar más de la cuenta).
"El amor real es intenso y caótico" (te lleva a aceptar relaciones inestables).

 

Paso 3: Elige una acción nueva.

Si siempre ignoraste las señales de alarma, esta vez pon límites antes (con este ejercicio conocerás esas señales y las tendrás presentes).

Si siempre diste más de lo que recibías, prueba a equilibrar la balanza.

Si siempre justificaste lo injustificable, atrévete a cuestionarlo.

 


El primer paso para cambiar es ver con claridad lo que antes hacías en automático. 

 

El amor NO debería doler 

 

Si sigues eligiendo a la misma persona con diferente nombre, no es el destino. Es un patrón.

 

La buena noticia es que los patrones pueden romperse. 

 

Hoy puedes empezar a hacer las cosas de otra manera.

 

Hoy puedes elegir diferente.

 

Hoy puedes decidir que mereces un amor que te haga sentir bien, en vez de un amor que te haga dudar de ti.

 

Si sientes que es el momento de dejar atrás este bucle y empezar a elegir diferente, pero te cuesta aplicar la teoría y sientes que no ves claro el camino para conseguirlo, busca ayuda en una persona con la que conectes.

 

 

Si quieres aprender a construir relaciones sanas y conectas conmigo, puedes escribirme por email a [email protected] o directamente por Whatsapp aquí:

 
CONTACTAR POR WHATSAPP

VER ÚLTIMOS ARTÍCULOS PUBLICADOS:

5 razones por las que repites el mismo tipo de pareja y cómo evitarlo

No es que no puedas superar la ruptura, es que lo intentas mal

Cómo sanar como hombre después de romper con tu ex